El mundo de las actualizaciones es complicado, desde los crípticos mensajes de Microsoft hasta los mensajes de desarrolladores en tiendas. Pero, parece que se acabaron los días dev“acumulativa 2025-10 para x64 (KB… 26200.xxxx)”. Windows arrastra una herencia de etiquetas largas y crípticas que quiere desterrar. Microsoft acaba de darle un corte de sierra: estandariza y simplifica los títulos de Windows Update para hacerlos más intuitivos y consistentes en Configuración, Historial de actualizaciones y Windows Release Health. La novedad llega con ejemplos tan claros como “Security Update (KB50xxxxx) (26100.xxxx)” o “Preview Update (KB50xxxxx) (26100.xxxx)”, y se extiende también a .NET Framework, drivers, componentes de IA e incluso Visual Studio.

Qué cambia exactamente en las actualizaciones de Windows 11

El nuevo formato prioriza lo relevante: nombre amigable, KB y build/versión. Se eliminan detalles superfluos, como la arquitectura o prefijos de fecha en el título. El objetivo: que el usuario entienda de un vistazo qué se instala sin bucear en tecnicismos. La verdad es que de primeras nos sigue resultando igual de complejo pero Microsoft tampoco puede hacer mucho más.

Dónde lo verás

• Configuración > Windows Update (durante la descarga/instalación).

• Configuración > Windows Update > Historial de actualizaciones.

• Windows Release Health (página de estado oficial).

La simplificación aplica a: calidad del sistema (Patch Tuesday y previews), .NET, drivers, componentes de IA y Visual Studio. No afecta a los títulos de feature updates (25H2, 24H2…) ni, en su mayoría, a lo que ves en Microsoft Update Catalog/WSUS, donde se mantienen los nombres tradicionales.

Si algo hemos repetido en Microsofters es que Windows Update comunica mal. El movimiento encaja con la línea de Windows 11 25H2 y su promesa de hacer el sistema más claro y predecible sin frenar el ritmo de mejoras por oleadas. Por eso, Windows 11 25H2 no ofrecía novedades, estas llegan por oleadas sin tener que esperar a la gran actualización.

Los KB y builds siguen ahí, así que quien necesite precisión la tiene. Pero para la mayoría, títulos legibles = decisiones rápidas: instalar ahora, posponer o abrir el detalle. Es algo más simple e intuitivo y al menos sabremos, más o menos, que estamos instalando.

Como ya es costumbre, Microsoft trabaja arduamente en mejorar y optimizar Windows 11 al máximo, por lo que, periódicamente, lanza actualizaciones con correcciones de errores y problemas, lo que es fantástico. Y, recientemente, ha comenzado a distribuir el parche KB5067112.

Sin embargo, debemos señalar que esta actualización no ha tenido el impacto positivo esperado, ya que, más allá de las correcciones, también se ha implementado un cambio que no complacerá a los usuarios, ya que se habla de publicidad personalizada. Esta información ha sido compartida por los compañeros de Winfuture.

La actualización KB5067112 para Windows 11 introduce un cambio para nada agradable: ofertas personalizadas

Es importante señalar que esta actualización, la KB5067112, va dirigida a Windows 11 23H2 e implementa varias correcciones de errores reportados por los usuarios. Esto es algo muy positivo, no se puede negar. Sin embargo, no es todo lo que se implementa con este parche.

Se ha revelado que esta actualización para Windows 11 mostrará ofertas personalizadas durante la configuración inicial del sistema operativo. Dicho de otro modo, en la interfaz de OOBE, pero también en la Configuración, una vez inicie y estés en el escritorio.

Este es un cambio que tiene sentido para Microsoft, ya que forma parte de una estrategia para hacer publicidad y compartir las novedades de sus productos y servicios, como la suscripción a Microsoft 365, Xbox Game Pass y mucho más.

Sin embargo, esto no suena para nada atractivo para los usuarios, ya que todo apunta a que Microsoft planea convertir en un canal de publicidad para sus servicios y productos. Esto puede ser muy molesto. Sin mencionar que, al menos por el momento, desconocemos si estos anuncios se podrán desactivar o si será algo permanente.

El parche KB5067112 es opcional, por lo que puedes elegir si quites instalarlo o no. Y si te preguntas si esto ha sido lo único que ha introducido esta actualización, lo cierto es que no. A continuación, te compartiremos el registro de cambios.

• Se ha corregido un problema relacionado al teclado en pantalla y que no reconocía entradas tras el modo de suspensión.
• Se ha eliminado el problema de comunicación con conexiones de almacenamiento en el entorno Azure.
• Se ha solucionado el fallo de funcionamiento de red que ocasionaba que los conmutadores virtuales se configuraran de forma incorrecta.

Existe la posibilidad de que Microsoft evalúe la reacción de los usuarios con respecto a estos anuncios y ofertas personalizadas que llegarán a Windows 11 y si notan el descontento, podrían dar marcha atrás. Pero esto es una especulación.

Llevamos unos meses hablando del nuevo Menú de Inicio en Windows 11. El Menú de Inicio ha sido, desde Windows 95, el pilar de la experiencia en PC. En Windows 11, su rediseño inicial dividió opiniones. Ahora Microsoft inicia el despliegue de un Inicio renovado centrado en más personalización, vistas nuevas y mejor adaptación a pantallas grandes. Llega con la actualización opcional previa de octubre (KB5067036) para Windows 11 24H2 y 25H2, con activación gradual (no todos lo verán al instante) y se generalizará con el próximo “Patch Tuesday” si no instalas la previa.

Que ofrece el nuevo Menú de Inicio

• Lista de “Todas las aplicaciones” en la página principal, con dos vistas: por categorías (agrupar apps automáticamente, estilo “shelf” de iOS/iPadOS) y en cuadrícula (lista alfabética con más aire). El sistema recuerda tu última vista.

• Diseño responsivo: en pantallas grandes puedes mostrar más apps ancladas y contenido recomendado. Puedes ocultar secciones que no uses desde Ajustes > Personalización > Inicio.

• Integración de Phone Link: aparece un botón junto a la búsqueda que despliega notificaciones, llamadas perdidas y SMS recientes del móvil conectado (Android o iOS, con llegada progresiva al EEE).

• Mejoras colaterales: animaciones al pasar el ratón por la barra de tareas y un icono de batería con porcentaje (activable desde Sistema > Energía y batería).

Cómo conseguirlo hoy (y por qué quizá aún no lo ves)

El nuevo Inicio forma parte de KB5067036 (28 de octubre de 2025). Para optar, activa el conmutador “Recibir las últimas actualizaciones en cuanto estén disponibles” en Windows Update y busca actualizaciones. Aun así, la función llega en oleadas (Controlled Feature Rollout), por lo que puede tardar en activarse tras instalar el parche. No se puede desactivar cuando llegue, aunque sí puedes apagar partes concretas como el panel de Phone Link o las vistas nuevas.

Desde la “rejilla” de Windows 8 hasta el Inicio de Windows 11, Microsoft ha probado varias fórmulas. Este giro pone el foco en encontrar apps más rápido y reducir fricción: categorías automáticas, más densidad en grandes monitores y atajos hacia el móvil. Es un movimiento claramente orientado a productividad y a cerrar debates de diseño abiertos desde 2021.

Trucos y consideraciones rápidas

• Si trabajas con monitores ultrapanorámicos, prueba la vista Cuadrícula: verás más entradas por fila y menos scroll.

• Si no te convence Recomendado, ocúltalo: el Inicio gana limpieza.

• Empresas: el cambio llegará con actualizaciones de calidad; revisa políticas de Windows Update for Business antes de forzar la previa.

El Inicio adaptativo también escala mejor en Copilot+ PCs, donde el escritorio tiende a poblarse de paneles y widgets; menos clics para abrir apps es oro en flujos de trabajo con IA. Sumado a animaciones más claras y estado de batería visible en todo el sistema, el conjunto refina la legibilidad y consistencia de Windows 11.

En Microsoft llevan dos décadas intentando darle “presencia” a su asistente: Clippy ha acabado siendo un meme. Cortana duró desde 2015 se apagó en 2023. Ahora Copilot ha tomado el relevo siendo, hasta ahora, voz y texto. Hoy da un paso más con Mico, un avatar opcional, expresivo y “de apoyo”, que cambia de color y gesticula durante las conversaciones por voz. No es puro maquillaje: llega acompañado de Groups (chats colaborativos con hasta 32 personas), un estilo conversacional llamado Real Talk que rebate con respeto, memoria a largo plazo, conectores con Google/Microsoft y acciones proactivas desde “Deep Research”. De momento, empieza en EE. UU. y se desplegará a más regiones en las próximas semanas.

¿Qué aporta exactamente Mico en Copilot y que lo diferencia de Clippy

Mico es una presencia visual opcional que “escucha, aprende y se gana tu confianza”, en palabras de Microsoft. Actúa como “cara” del modo voz de Copilot y reacciona con animaciones y cambio de color según el contexto, sin invadir la pantalla. La idea es hacer la conversación más natural y “calentar” la interfaz cuando Copilot habla, sin añadir fricción: si no te convence, lo desactivas y nos olvidamos de Mico.

Además, Microsoft detalla Learn Live, un modo tutor socrático con voz, pizarras y señales visuales para “aprender haciendo”. En paralelo, Real Talk introduce un tono menos complaciente: Copilot discute supuestos, aporta contrapuntos y se adapta a tu “vibe”. Es un giro UX que deja de premiar sólo la respuesta rápida y prioriza calidad de diálogo.

La novedad más potente en colaboración es Groups: hasta 32 personas con Copilot en la misma sesión para co-escribir, planificar, resumir hilos, votar y repartir tareas. Compartes un enlace y todos ven el mismo contexto. Esto convierte a Copilot en facilitador de equipo, no sólo en chatbot 1:1.

En el plano personal, Copilot incorpora memoria a largo plazo y Memory & Personalization: puedes pedirle que recuerde datos (un aniversario, un entrenamiento) y recuperarlos después; también referenciar chats pasados, con control para editar o borrar esa memoria cuando quieras. Con conectores (Outlook/OneDrive, Gmail/Google Drive/Calendar), Copilot busca en tus cuentas —siempre con consentimiento explícito— para responder con más contexto.

Del “responder” al “actuar”: proactividad y Edge

Microsoft empuja a Copilot hacia el terreno “agentic”. El preview de Proactive Actions en Deep Research sugiere pasos basados en tu actividad reciente, evitando empezar de cero. Y en Edge, el llamado AI browser evoluciona el Copilot Mode: con permiso del usuario, lee pestañas, resume, compara y toma acciones (reservar, rellenar formularios) con navegación por voz y un historial Journeys que ordena lo visto para retomarlo después. Es un cambio de paradigma: del “dime qué hacer” al “déjame hacerlo”.

Parece que la Microsoft Store no para. Desde su reinvención en Windows 11, la Microsoft Store ha pasado de ser “el escaparate que nadie abría” a un centro de distribución serio: más catálogo, mejores políticas y un ritmo de mejoras constante. La última vuelta de tuerca llega con la versión 22509, que introduce un cambio de calado: ya no es posible desactivar de forma indefinida las actualizaciones automáticas de apps; solo pausarlas entre 1 y 5 semanas. La medida replica el comportamiento de Windows Update y busca homogeneizar la experiencia y reforzar la seguridad del ecosistema. Un salto que refuerza la confianza en la Microsoft Store.

Qué cambia en la Microsoft Store de Windows 11

Antes podíamos apagar las actualizaciones automáticas de la Store y encargarte manualmente de actualizar tus aplicaciones. Ahora, al desactivar el interruptor, la Store te pide elegir una duración de pausa (1–5 semanas). Al terminar ese plazo, se reanudan las actualizaciones.

Microsoft no ha publicado una nota de cambios extensa, pero el movimiento encaja con la filosofía de Windows Update: permitir retrasos razonables y evitar que equipos queden anclados en versiones vulnerables. A nivel práctico, reduce la superficie de riesgo sin quitar al usuario la capacidad de temporizar.

Esto es muy interesante porque se reduce el riesgo por apps desactualizadas y más coherencia con Windows Update. Además supone un mejor problema para aquellos equipos que son gestionados y su soporte.

La Store acelera su hoja de ruta

Medios especializados han detectado el cambio en las últimas semanas y lo sitúan en el despliegue de la versión 22509. Aunque el detalle oficial es escueto, la tendencia es clara: más control centralizado y actualizaciones inevitables tras una ventana de gracia, igual que en el propio sistema. Parece que la Microsoft Store va ganando relevancia por fin en Windows 11 tras todos los intentos fallidos anteriores que vimos desde Windows 10.