Mucho se ha escrito en las redes sobre la Surface Go, la tablet más pequeña de la gama Surface que fue presentada a mediados de 2018. Sus especificaciones dieron que hablar desde muy temprano, principalmente por el procesador Intel Pentium Gold 4415y, el cual, según más de un «gurú» de la tecnología, condenaba a este producto al fracaso y a la irrelevancia.
Yo adquirí este producto hace ya más de un mes y, tras haberle dado un uso muy intensivo, me he propuesto desmontar uno a uno todos los mitos y falsedades que he leído sobre ella. ¡Vamos allá!
1. «El procesador Pentium ofrece un rendimiento pobre»
No os voy a mentir, este era uno de mis principales miedos cuando adquirí la Surface Go. Temiendo sufrir la falta de potencia del dispositivo, decidí en el último momento comprar el modelo con 8 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento SSD (ya que el modelo menor tan solo tiene 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento eMMC).
Sin embargo, el procesador es el mismo en todos los modelos, un Intel Pentium Gold 4415y con arquitectura Kaby Lake. Se trata de un procesador de gama de entrada enfocado a un bajo consumo y, por tanto, a realizar tareas básicas consumiendo la menor energía posible.
En mi opinión, Microsoft no tenía alternativa en este punto. Dotar de un procesador más potente a la Surface Go habría echado por tierra el concepto de una tablet tan pequeña (no tiene rival en este factor de forma), obligando a la compañía a diseñar un producto distinto que perdería todas sus ventajas competitivas y no tendría nada que hacer contra su hermana mayor: la Surface Pro.

Por su parte, los procesadores con arquitectura ARM no estaban ni mucho menos preparados para ofrecer un rendimiento de garantías. Microsoft tomó una decisión conservadora pero necesaria: si hay quejas con el rendimiento del Pentium Gold, estas se habrían multiplicado por 100 en el caso de haber incluido un procesador con arquitectura ARM.
Ahora bien, el equipo requiere un cuidado. Lo compré de segunda mano prácticamente nuevo en una tienda CEX y me encontré con un panorama digno de mención: Chrome como navegador principal, un antivirus instalado, muchas actualizaciones sin aplicar, muchos programas instalados y ejecutándose al inicio, etc. El cuidado y mantenimiento de un equipo siempre es importante, pero en el caso de aparatos como la Surface Go es imprescindible debido a su limitada potencia; la tablet no va sobrada y, sin un mantenimiento adecuado, la degradación del rendimiento es muy notoria.
Personalmente, el rendimiento de la Surface Go me ha sorprendido para bien. Es más, desde que la compré no he tenido la necesidad de echar mano de mi equipo principal para nada más que para jugar. El resto de mis tareas diarias se basan en el uso de Word, Excel, PowerPoint, navegador, YouTube y Telegram, programas que la Surface Go mueve a las mil maravillas y de forma tremendamente cómoda para mi gusto debido a lo fácil que es transportarla y al poco espacio que ocupa en la mesa de trabajo (la cual muchos solemos llenar de papeles, otros gadgets, bolígrafos, café y un largo etcétera).
2. «Los marcos son demasiado grandes»

Este fue otro de mis grandes temores a la hora de adquirir el dispositivo, y es que le doy mucha importancia al diseño de mis aparatos electrónicos. Sin embargo, para mí el diseño no solo tiene que ser bonito, sino también funcional. En este caso, los acusados marcos de la Surface Go me hacen la vida muy fácil cuando la utilizo en modo tableta para ver contenido multimedia. No entiendo cómo pueden los usuarios del iPad Pro agarrar cómodamente ese equipo sin estar pendientes de no realizar pulsaciones involuntarias en la pantalla.
Más allá de eso, el diseño del equipo me parece una maravilla. Microsoft no ha recortado en nada y seguimos teniendo esa aleación de magnesio característica de la gama Surface y un teclado con acabado alcántara cuyo tacto es simplemente delicioso. El diseño tampoco es criticable en este equipo, no tiene ni un resquicio.
3. «Le faltan puertos: pobre conectividad»
Vamos a analizar los puertos de los que goza la Surface Go: un USB-C, un puerto Surface Connect para cargar la tablet e incluso conectar un dock para ampliar los puertos, un jack 3.5 para auriculares y una ranura para tarjetas microSD. ¿De verdad está tan mal? Es cierto que lo que más se echa en falta es un puerto USB tradicional, pero hoy en día los adaptadores son muy baratos y se pueden transportar con gran comodidad.
Microsoft podría haber incluido este puerto ensanchando mínimamente la tablet (tan solo 0.2mm) pero el equipo de diseño del producto decidió no hacerlo. En cuanto a las razones, podemos ser más o menos desconfiados (muchos argumentan que el fin es vender los accesorios de conectividad de Microsoft).
4. Conclusiones

Cuando se critica un producto, hay que hacerlo con criterio. Lo que no es honesto es pedirle al producto cosas que están fuera de su alcance, y eso se ha hecho con la Surface Go. Entre las diversas críticas que inundan la web he encontrado algunas que culpan a la Surface Go de no poder correr juegos modernos, de no poder correr con fluidez aplicaciones de diseño pesadas y un largo etcétera.
Desde mi humilde opinión, reclamar a la Surface Go que haga cosas para las que no está pensada carece totalmente de sentido. Es como pedirle a una tostadora que nos lave la ropa. Se trata de una tablet especialmente pequeña, ideal para ofimática y consumo de contenido multimedia, pero nada más. Su punto fuerte respecto a rivales como el iPad es la posibilidad de conectarle un ratón y disfrutar de un sistema operativo de escritorio completo.
Es importante no remar a contracorriente con la Surface Go: debemos usar el navegador Edge (el actual o el que está por venir), no debemos instalar más antivirus porque con Windows Defender es más que suficiente, no hay que llenarla de programas pesados enfocados a equipos mucho más potentes… En definitiva, hay que ser responsables y conscientes. Con un uso adecuado es un dispositivo increíble; de hecho, estoy escribiendo estas líneas con ella y no estoy teniendo ningún tipo de problema. Su versatilidad y portabilidad hacen que, a día de hoy, no tenga rival en el mercado.
¡Por cierto, antes de que se me olvide! Si queréis conocer la Surface Go más a fondo, nuestro compañero Pablo ya realizó una extensa review sobre ella. ¡Echadle un vistazo si tenéis alguna duda sobre el dispositivo!