Este no es el año para las impresoras en Windows, no importa en que versión de Windows te encuentres, el problema está ahí. Microsoft ha resuelto alguna de las vulnerabilidades vinculadas con las impresoras, pero, a costa de problemas de compatibilidad. Los fallos que estaban presentes en Windows 10 parecen haberse arrastrado a Windows 11.
Las impresoras fallan en Windows 10 y Windows 11
Existen tres problemas a la hora de trabajar en Windows 10 y Windows 11. Por un lado, la instalación de impresoras a través de conexiones de red puede fallar en ciertos casos. Falla a la hora de descargar e instalar los drivers necesarios.
Este fallo se ha visto en los dispositivos que acceden a las impresoras a través de un servidor de impresión, utilizando conexiones HTTP. Cuando un cliente se conecta al servidor para instalar el driver existe un fallo en el directorio por el que no se descargan los drivers. La solución pasa por instalar los drivers de manera manual.
El segundo problema supone que las propiedades de impresión particulares no se proporcionan al servidor de impresión. Este es un problema que afecta al servidor de impresión y no a la impresión directa.
Este problema es el resultado de una creación incorrecta del archivo de datos que contiene las propiedades de la impresora. Los clientes que reciban este archivo de datos no podrán usar el contenido del archivo y, en su lugar, continuarán con la configuración de impresión predeterminada.
Es posible que la instalación de impresoras a través del Protocolo de impresión de Internet (IPP) no se haya realizado correctamente
Es posible que la instalación de impresoras mediante el Protocolo de impresión de Internet (IPP) no se complete correctamente.
Microsoft está trabajando en una resolución para todos los problemas y ultima su lanzamiento en una actualización futura. Parece que la seguridad vinculada a las impresoras ha generado infinidad de problemas.