Windows 11 ya lleva algo más de un mes entre nosotros y las opiniones sobre él son muy dispares. La respuesta general por parte de la comunidad hacia el nuevo sistema operativo es positiva pero no exultante. Uno de los principales motivos por los que Windows 11 nos deja un sabor agridulce es el rendimiento de ciertas partes modernas de la interfaz. Ahora, los de Redmond por fin reconocen este problema y prometen darle solución.
Windows 11 y una de sus asignaturas pendientes
Es cierto que Windows 11 se siente, a grandes rasgos, más rápido y fluido que Windows 10. Esto es así principalmente por las nuevas animaciones del sistema, las cuales contribuyen mucho a generar esa sensación de fluidez.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce en el nuevo niño mimado de Microsoft. Las partes más modernas de la interfaz como los nuevos menús de clic derecho, la barra de comandos del Explorador de Archivos o el menú de ajustes rápidos se sienten en ocasiones más lentos e inestables de lo que deberían.
Microsoft ha reconocido este problema en el última AUA (Ask Us Anything) en el que han participado representantes del equipo de desarrollo de Windows. Un usuario expuso una queja sobre el rendimiento de estas partes modernas de Windows 11 y esta fue la respuesta que recibió:
El rendimiento será un área en la que nos enfoquemos en 2022. La mayor parte de ese trabajo irá dedicado al rendimiento de inicio y apertura de aplicaciones. En lo que respecta al renderizado de elementos de la interfaz de usuario, hemos probado la escalabilidad haciendo cosas como poner diez mil botones en pantalla, etc. La mayoría de los elementos de la interfaz ya renderizan rápido pero nos gustaría entender qué tipo de lentitud y problemas de escalado estáis sufriendo para analizar esos escenarios concretos.
[…] De manera interna, también hemos creado recientemente un equipo para tratar este asunto más holísticamente. Estamos haciendo muchas cosas de forma colectiva para asegurarnos de que logramos un buen rendimiento en Windows 11.
Estamos ante muy buenas noticias para todos aquellos que temían que Microsoft comenzase a descuidar el apartado del rendimiento en Windows 11. Los de Redmond tienen intención de que su nuevo sistema operativo sea muy gratificante de usar y eso no se refiere solamente a la estética.
Actualmente, el feedback que Microsoft está recibiendo con Windows 11 debe ser bastante positivo porque están acelerando el lanzamiento a más dispositivos durante los últimos días. Si consiguen solucionar en los próximos meses el rendimiento de estas partes modernas del sistema, Windows 11 alcanzará su madurez y será muy difícil justificar mantenerse en Windows 10 si se tiene la posibilidad de actualizar.
