Cuando parecía que las aguas comenzaban a calmarse y que Windows 10 November 2019 Update empezaba a librarse de los problemas del mes de septiembre y octubre llega un nuevo problema. En esta ocasión llega a algunos equipos con un driver de Intel que llega a través de Windows Update.
Un problema de drivers, el último problema de Windows 10
En esta ocasión el culpable de los problemas es un driver de Intel que llega a través de Windows Update. En este momento afecta sobre todo a equipos de la empresa HP, sobre todo en equipos como el ProBook 450 G6.
De acuerdo con un mensaje en la comunidad de Microsoft, el parche KB4517389 incluía una actualización del Intel Display Driver a la versión 26.20.100.7157 y llevaba a una experiencia de usuario pobre. Estos usuarios indicaron problemas en Edge y Chrome y lo han indicado en diferentes sitios.
Aunque el problema de la pantalla es molesto, no parece afectar al rendimiento de los equipos y no los hace inoperativos. Así pues, esto permite a los usuarios volver a la versión anterior del driver y solventar así el problema temporalmente.