Ayer fue el día esperado, Samsung presentaba en un nuevo Galaxy Unpacked nuevos dispositivos. El lugar elegido para la ocasión era Brooklyn. Durante este evento se presentaron los nuevos Galaxy Note 10 además del Galaxy Book S, su último portátil. Este portátil incorpora el esperado Qualcomm 8cx.
Samsung Galaxy Book S disponible desde 999€
En primer lugar tenemos que hablar del procesador. Qualcomm ha desarrollado este chip para estar a la par con un Intel Core i5 en términos de potencia. Con este procesador, Samsung afirma que dispone de un rendimiento un 40% superior y una grafica un 80% superior que su predecesor, el Samsung Galaxy Book 2 con el Snapdragon 850. A pesar de este gran rendimiento, este portátil no dispone de ventilador.
«Los chips Snapdragon 8cx nos muestran una nueva era de dispositivos siempre conectados, estos dispositivos nos empoderan para trabajar, hacer uso de la multitarea y jugar desde cualquier parte. Nos negamos a comprometer el rendimiento por autonomía y en lugar de eso hemos combinado los dos para crear un dispositivo potente que ofrece una computación móvil de primera con la movilidad y conectividad de un smartphone.»
Resulta curioso ver como el Samsung Galaxy Book S no es un convertible, el primero en Windows sobre ARM. Eso si, dispone de una pantalla táctil con soporte de 10 puntos. Como suele suceder con los PCs ARM dispone de una batería increíble con 23 horas de reproducción de vídeo.
Si hablamos del resto de especificaciones dispone de una pantalla de 13,3″ TFT, eliminando así el panel AMOLED de su predecesor. Por otra parte, su peso se queda en 0,96kg y 11,8 milímetros de grosor. Dispone de 8GB LPDDR4X de RAM, y 256 o 512GB de almacenamiento interno. Como cualquier chip Snapdragon dispone de conectividad 4G LTE de Categoría 18 para disfrutar de la máxima velocidad.
El Samsung Galaxy Book S llegará en dos colores: Earthly Gold y Mercury Gray durante el mes de septiembre. Su precio, quizás lo que menos nos gusta, comienza en los 999 dólares. Todavía desconocemos si se hará un cambio directo a euros pero nada nos hace pensar lo contrario.
