Con total seguridad, este artículo no tendrá ni un cuarto de la repercusión que la inocentada publicada el 28 de diciembre. Ciertamente, Microsoft no ha comprado Sony. Sin embargo, Google y Facebook se encargaron de darle una veracidad a una noticia falsa a todas luces. El «boom» fue tal que el servidor dejó de responder por momentos, impidiéndonos continuar publicando noticias (noticias reales).
Google y Facebook, principales culpables de la difusión
Todo medio digital depende de otros dos gigantes: Google y Facebook. Google tiene el 90% de cuota mundial en cuanto a buscadores, con lo cual es la principal vía que tienen los usuarios para encontrarnos. Además, Google cuenta con Discover, un pequeño feed de noticias que aparece en sus aplicaciones para iOS y Android.
En Discover aparecen todas las noticias relacionadas con nuestras preferencias. Esta herramienta cuenta con un algoritmo que usa nuestras búsquedas, gustos y temas seguidos para ofrecernos información personalizada. En otras palabras, se podría decir que Google nos muestra lo que queremos leer… ¿Y quién no querría leer que Microsoft ha comprado Sony?
Esa es la historia de cómo Google viralizó una noticia falsa, porque era lo que la gente quería leer. En el momento de publicar el artículo, no sabíamos que eso podía ocurrir. La razón es que inocentes nosotros, nos creemos lo que Google nos dice sobre posicionamiento: utilizar titulares naturales y descriptivos, usar fuentes de confianza y crear noticias reales.
La realidad es que Discover está lleno de titulares engañosos y noticias cuyo contenido está poco o nada contrastado. De la misma manera, el algoritmo detectó que la inocentada sobre Sony era perfecta para que la gente entrase a leerla, y así fue. Al fin y al cabo, Google es una empresa publicitaria y, al entrar, los usuarios consumen publicidad de Google. Ellos siempre ganan.
En cuanto a Facebook, el algoritmo que coloca las noticias en nuestro feed actúa de una forma parecida. Facebook también nos va a proporcionar contenido que queramos leer en base a nuestros gustos, y actuó de la misma manera. Efectivamente, la empresa que está en el punto de mira por las fake news en las elecciones estadounidenses, sigue incentivando que consumamos noticias falsas.
La facilidad de compartir bulos sin contrastar la información
Sin embargo, no solo los algoritmos hacen su función de hacernos llegar lo que queremos leer. Esta función también corresponde a nuestros amigos, familiares (cuñados) y gente con influencia en redes sociales. Este es el segundo mayor método a la hora de difundir noticias falsas o bulos. ¿Cuánta gente compartió la noticia de la compra de Sony en Twitter, Facebook, YouTube… e, incluso, LinkedIn?
Según los datos que manejamos, en Twitter y Facebook, miles de personas compartieron la noticia. Podemos destacar a Santiago Niño Becerra, economista, catedrático en la Universidad de Barcelona y colaborador en La Sexta. El economista publicó la noticia en su cuenta de Twitter, donde tiene más de 200 mil seguidores, y tuvo que «recoger cable» varias horas después de mala manera.
Proseguimos hacia el oligopolio. https://t.co/XAVFa4Lvx5
— Santiago Niño (@sninobecerra) December 28, 2020
La cuenta de Mundo Desconocido, con cerca de 80 mil seguidores, también se hacía eco de la noticia destacando que ahora «Sony también es Bill Gates», aunque lo borró pocos minutos después al descubrir la inocentada. De hecho, sorprende porque hablamos de un personaje que perfectamente podría decir que Araceli, la primera vacunada contra la COVID-19, ahora vive conectada a la red 5G de Vodafone.
Difundir bulos es más sencillo que leerse la noticia. En LinkedIn, directivos, brokers y economistas se hicieron eco de la noticia. Hablamos de una red social corporativa, donde te juegas tu credibilidad. Esto demuestra que, independientemente de tu cargo o estatus social, nadie se libra de caer en la trampa y colaborar en la difusión de noticias falsas.
Realmente, la principal razón de esto es que la gente se queda únicamente con el titular. Si alguien observa los comentarios de la noticia, muchísimos usuarios se percataron de que la noticia no podía ser real. Las cifras y el hecho podrían ser reales, ¿pero realmente alguien puede pensar que Microsoft quiere recuperar Groove Música? ¿O que los reguladores fuesen a permitir una compra claramente monopolística?
Los haters y la frustración que provocan las fake news
Encontrarte la noticia en Google y descubrir que se trata de una noticia falsa, genera frustración. Sin embargo, estas fake news provocan una frustración todavía mayor cuando es un conocido quien te la envía. Pongamos que tu mejor amigo te acaba de enviar una noticia donde te dicen que vas a poder jugar a Spider-Man: Miles Morales en tu flamante Xbox.
En ese momento no te paras a pensar si es 28 de diciembre, entras a la web de Xbox y comienzas a ver cuánto costaría la suscripción a Game Pass. Sin embargo, terminas de leer la noticia o lees los comentarios, y ahí es cuando empiezas a ver la cruda realidad: la noticia es falsa, una inocentada, has picado y esa ilusión se desvanece. ¿Qué ocurre entonces? La culpa es del redactor.
Ciertamente, un servidor escribió la noticia inocentada, y pese a que puedo decir que a mucha gente le encantó la inocentada, siempre acaban destacando las malas personas. De esta forma, os puedo comentar que, a través de Twitter, sobre todo, no me llamaron cosas especialmente bonitas ni se acordaron de mi familia por ser Navidad, precisamente.
«Lo habéis hecho por un puñado de visitas»
La respuesta, rotundamente, es un no. En el momento en el que pulsamos el botón de publicar, nunca sabíamos lo que podría llegar a pasar. Ni remotamente imaginamos que íbamos a recibir tal cantidad de tráfico. La principal prueba de ello es que el servidor no estaba preparado ni dimensionado para atender 700 peticiones por minuto.
Cierto es que una inocentada, al contrario de lo que nos gustaría, se ha convertido en la noticia más leída de Microsofters, desde que echásemos a andar en mayo de 2018. Sin embargo, el reunir a 4 mil personas de forma simultánea en la web, nos provocó más problemas que beneficios: ralentización del servidor, múltiples caídas y la imposibilidad de acceder al backend de WordPress para seguir publicando noticias.
Ojalá, Google nos posicionase de la misma forma cuando publicamos noticias sobre Windows 10, Microsoft Teams o cualquier otra noticia real de nuestra operativa habitual. Sin embargo, la carnaza y los titulares clickbait venden muchísimo más y permiten que Google obtenga más beneficio. Al final, que Google sea la principal fuente de ingresos de muchos medios, lo único que provoca es la corrupción y el sesgo de la información.
De ahí, que muchos medios deportivos hablen siempre de uno o dos equipos de fútbol, o especulen con rumores de fichajes imposibles. ¿Mbappé jugando en el Real Madrid o Messi, en el Atlético de Madrid? ¿A quién no le gustaría leer eso? Y de la misma manera ocurre con otros medios «serios», que se dedican a propagar bulos sobre diferentes partidos políticos.
Por eso mismo, veréis cómo la noticia falsa rápidamente aparece en vuestros chats de WhatsApp o vuestras redes sociales, pero nunca veréis la rectificación. Queda en nuestras manos contrastar y verificar la información que recibimos. Por desgracia, como decía al principio, este artículo no tendrá ni la mitad de difusión que, si os dijese que «Microsoft adquiere Sony con todas sus divisiones, incluyendo PlayStation»