Malas noticias para muchos usuarios de Windows 10. Parece que no todos podremos actualizar a Windows 11. Microsoft quiere que esta nueva generación de Windows sea un antes y un después en la historia de su sistema operativo. Como se suele decir: «no se puede hacer una tortilla sin romper algunos huevos.
Presuntos requisitos de Windows 11
Por lo que sabemos hasta ahora, estos podrían ser los requisitos de Windows 11:
- Procesador de al menos 2 núcleos.
- Memoria RAM de 4 GB o más.
- Almacenamiento interno de, al menos, 64 GB.
- Secure Boot.
- TPM 2.0.
Si estamos en lo cierto, esto supondría una gran criba a nivel mundial. Secure Boot es obligatorio desde 2013 con Windows 8. TPM 2.0 es obligatorio en los equipos desde 2016 en los equipos con Windows 10 preinstalado.
La exigencia de TPM 2.0 (módulo de plataforma de confianza) es probablemente la que a más gente dejará en el camino por ser la más reciente. Si bien es cierto que los fabricantes podían utilizarlo desde antes de 2016, hasta entonces no era obligatorio y es poco probable que tu equipo de antes de esa fecha tenga este módulo.
¿Cómo saber si tengo TPM 2.0?
Podemos comprobar si nuestro PC tiene TPM 2.0 de manera muy sencilla en muy pocos pasos. Para ello, haced lo siguiente:
- Escribid «Ejecutar» en la búsqueda de Windows y pulsad sobre su icono o, en su defecto, acceded mediante el atajo Windows + R.
- Escribid el comando tpm.msc y ejecutadlo.
- Comprobad en la parte inferior derecha de la imagen que tenéis la versión 2.0.
¿Por qué estos requisitos en Windows 11?
Todavía no sabemos si estos serán los requisitos finales a pesar de que es muy probable a juzgar por los indicios presentes. No nos extrañaría que esto fuese cierto y se debe a dos principales motivos:
El primero es la seguridad y modernización de la plataforma. Cuando Microsoft canceló indefinidamente Windows 10X, prometió llevar a Windows 11 algunas «características fundacionales» de este. Sospechamos que no se referían solo a cuestiones de interfaz como la nueva barra de tareas o el nuevo menú Inicio sino que quieren ir mucho más allá.
Windows 10X exigía tanto Secure Boot como TPM 2.0 y es probable que los de Redmond quieran ofrecer el mismo grado de seguridad mínima en Windows 11. De hecho, quizás alguna característica futura a implementar no podría hacerse efectiva sin estos requisitos.
El segundo motivo es el rendimiento y el intento de ofrecer un estándar mínimo de calidad. Microsoft quiere evitar que se sigan vendiendo equipos con configuraciones como 2GB de RAM y 32GB de almacenamiento interno.
Windows requiere hoy tanto de más uso de RAM como de más almacenamiento para ofrecer un rendimiento decente. Esos equipos ya sufren muchísimo con Windows 10 y no son pocos los que opinan que los requisitos debieron cambiar hace años.
Algunos usuarios creen que estos podrían ser simplemente requisitos para los OEMs y que no se exigirán finalmente al usuario que pretenda instalar Windows 11. De momento todo son elucubraciones pero esta es la información de la que disponemos a día de hoy y lo que nos muestra el instalador de la versión filtrada de Windows 11.
Es importante recordar que Microsoft ha trabajado paralelamente en la actualización 21H2 de Windows 10 y esta recibirá parte de las innovaciones de Windows 11 a través de un Experience Pack. Falta por ver hasta dónde llegará este. Permaneced atentos al evento del 24 de junio.